La casa de Julia se encuentra en Almagro, un pueblo de unos nueve mil habitantes situado entre pequeñas formaciones montañosas, a apenas veintiséis kilómetros de Ciudad Real y muy próximo a una de las pocas zonas de origen volcánico dentro de la península ibérica (cerro de la Yezosa). Su situación privilegiada no solo permite disfrutar de la riqueza cultural y arquitectónica del municipio, declarado conjunto histórico-artístico en 1972, sino también de diferentes monumentos y lugares de interés circundantes, como el Castillo de Calatrava la Vieja o el Parque Arqueológico de Alarcos.